Si me has seguido por un tiempo, sabrás que mi viaje ha sido todo menos convencional. En el intrincado mundo del blogging, las historias personales son las que más resonancia tienen, y hoy quiero compartir un tema que ha transformado mi existencia: la guía espiritual y familiar.

Hace unos años, me encontré en una encrucijada. A pesar de que todo parecía ir bien en la superficie, internamente me sentía perdida. Al igual que muchos de ustedes, busqué respuestas en libros, cursos, y sí, también en Google con frases como "encontrar mi propósito" o "guía espiritual significado".

Un día, durante una meditación profunda (un hábito que adopté en mis búsquedas espirituales), experimenté una revelación. Me di cuenta de que la guía espiritual que buscaba no sólo residía en prácticas o enseñanzas distantes, sino que estaba arraigada en mi propia familia.

Mirando hacia atrás, comprendí que las enseñanzas de mis abuelos, las historias de superación de mis padres y las risas de mis hermanos llevaban mensajes espirituales profundos. Estos momentos, que a menudo pasamos por alto en la búsqueda de respuestas "grandes", eran en realidad las piedras angulares de mi guía espiritual.

No estoy diciendo que todos encuentren su orientación espiritual en la familia. Pero mi experiencia me enseñó a valorar y buscar la sabiduría en los lugares más cercanos y cotidianos.

Desde entonces, mi vida ha tomado un nuevo rumbo. Cada vez que siento incertidumbre, en lugar de buscar respuestas en lugares lejanos, me vuelvo hacia mi familia y hacia mi interior. Allí, siempre encuentro una chispa de claridad.

Con amor,
Zulma